Descubre tu PROPIA creatividad!!

Page copy protected against web site content infringement by Copyscape

miércoles, 24 de febrero de 2010

Si mis padres supieran...

Cuando ella me consultó, lo primero que me impactó fue su forma de presentarse. Vestía de manera discreta y prolija, clásica, elegante, pero de un modo que la hacía parecer mucho mayor de la edad que dijo tener, 22 años. Se describía a sí misma como "una hija de familia, con valores basados en la educacion tradicional". "Siempre estuve rodeada de gente, y siempre me he sentido sola".
Nunca tuvo amistades, ni tampoco relación amorosa. Hacía un tiempo había conocido un "chico", con esta palabra lo describió. "Fue el primero que mostró su deseo y atraccion por mi... Y yo ingenuamente por no querer perderlo porque por primera vez no me sentía sola, accedí - aquí hizo una pausa seguida de un largo suspiro - perdí mi virginidad".
Parecía realmente afectada al decir estas palabras. "Fue mi elecciòn en ese momento -siguió, hablando con incomodidad, como si no se atreviera a poner en palabras lo que pensaba. "Digo... hacerlo... aun no sé si realmente estaba enamorada"
Se quedó en silencio durante un rato, como reuniendo fuerzas para continuar.
"Ahora me siento muy mal conmigo misma, porque no he sido lo que mis padres esperaban".
Se secó los ojos con un pañuelo de papel, arrugado entre sus dedos.
"Él me volvio a buscar para acostarse conmigo y me negué, rotundamente... " suspiró.
"hace poco me entere que tenia novia y me siento muy mal... Me preocupa lo que mis padres piensan... cuando me miran, tengo la sensación de que lo saben todo y que piensan muy mal de mí, que estarían muy decepcionados si supieran lo que hice..."






"Una hija de familia, educada de manera tradicional", y aquí pienso que ajustarse a esta educación tradicional exige dejar de lado los sentimientos íntimos que se experimenten. De ese modo, es muy comprensible esta sensación de soledad. El vinculo familiar, a costa de ajustarse a un modelo preformado tiene, necesariamente, que perder algo de espontaneidad. Estos sentimientos deben dejarse a un costado para poder encajar en el modelo tradicional. Cuando las personas sienten temor de mostrar lo que sienten, la relación pierde profundidad. Y de allí un paso hacia esa vivencia de soledad. Sentir el afecto de los seres cercanos nos hace sentir vivos. Cuando este "chico" que ella conoce le muestra interés, toda su necesidad de afecto se desborda. Algo ha hecho que en esta situación, ella no tuviera la vivencia de una elección. Siente que ha dado algo precioso y se siente engañada...

"perdi mi virginidad" dice.
Siento que aquí se necesita trabajar con Roxana* para que pueda encontrar sus propias respuestas sobre qué significa para ella misma y no para sus padres "perder la virginidad". Crecer tiene que ver con encontrar esas propias respuestas. animándose a que éstas no concuerden con la visión de los padres y de otras figuras de autoridad.

Crecer también tiene que ver con ejercer su libertad y esta libertad implica además la necesidad de ser responsable de sus actos: elegir el sexo y el amor sabiendo que la persona con quien lo va a compartir merece su respeto y la respeta.

Esta experiencia es dolorosa para Roxana. Y esto que duele tiene que ver con que ella siente que no eligió. Ella transigió. Aceptó un intercambio que no evaluó desde la perspectiva de una mujer libre y responsable. Accedió como accede siempre frente a sus padres: se somete para obtener su amor incondicional.
Cuando no se somete, cuando pese a lo que sus padres esperaban, ella hace otra cosa, teme la decepción de los padres, se siente indigna, se siente culpable, siente que no cumplió: "Cuando me miran, tengo la sensación de que lo saben todo y que piensan muy mal de mí, que estarían muy decepcionados si supieran lo que hice..."
Qué sentimientos y temores deberá elaborar Roxana para elegir mejor la próxima vez?
Es una joven mujer inteligente que se desenvuelve con mucha responsabilidad en un trabajo calificado en relaciones públicas. Y sin embargo, no ha podido utilizar ese conocimiento humano en la elección de este hombre con el cuál iniciarse sexualmente. Como si desobedecer la imposición parental causara tanta culpa que ella misma se impusiera, sin poderlo evitar, el castigo. Tal vez se trate de un castigo más soportable que descubrir que ella puede ser distinta, que ella puede pensar por sí misma, que sus padres pueden estar equivocados en esto y ella puede tener razón.

Dejar de ser lo que los padres esperan y empezar a ser lo que ella espera de si misma sería lo mejor que podría pasarle. Podrá Roxana capitalizar esta experiencia?. Si no puede reconocer, ahora que todo pasó, los signos que deberían haberle alertado de lo que ella misma esperaba de esta primera relación y si estaba eligiendo, en ese caso a la persona correcta para encararla , habrá que revisar de nuevo esas escenas aunque le duelan. Habrá que trabajar activamente para aprender a valorarse más. Habrá que decidir cómo llevará adelante su vida erótica en el futuro...cómo elegirá a un hombre que la respete y la trate con cuidado, dispuesto a darse sin presionar.

Habrá que descubrir que el mundo no es la selva que le han pintado sus padres.
O bien, que si es cierto que hay selvas en el mundo, ella tiene la percepción necesaria para descubrir sus caminos y los paisajes que desea recorrer.



Foto: Thomas Dworzak, RUSSIA - Chechnya -04-07 1996 Grozny Chechnya under the Russian occupation. Bus. Magnun Photos.

* Los nombres, profesiones, países, las situaciones en general se presentan siempre modificados de modo que sea imposible reconocer la identidad del consultante.

2 comentarios:

FernanDito dijo...

Los padres imponemos principios y creencias o dogmas, precisamente para que produzcan dolor o temor en las mentes de nuestros hijos, como guias en caso de duda; pero algunos no anticipamos las consecuencias a largo plazo, por eso ahora les enseño a mis hijos a comprender a quienes obran mal, haciendoles ver que cada persona vive su propio infierno.

Mi esposa me dice que soy un grosero con los nenes, pero creo que al ser crudo con ellos, entienden mejor el porque aceptamos los errores en lugar de convertirlos en culpa; porque lo querramos o no, vivimos un infierno compartido, donde a todos nos afecta [poco o mucho] las decisiones de cada persona cercana (ya sean familiares, amigos, o vecinos).

De igual manera les hago entender que ellos tambien tendran sus principios y prioridades para con sus hijos, cuando los tengan.

Psicóloga argentina dijo...

Es claro que no hay un libro de recetas ni un código escrito de lo que hay que hacer en el oficio de padres, nos quedamos siempre con la sensación de que muchas cosas escapan a nuestro control. Los hijos necesitan tener claros los límites. Sin embargo, en el caso comentado, esos límites se internalizaron de manera de atar las alas. No hay recetas justamente porque con estímulos similares, las personas pueden construir cosas muy diversas. Y siempre el verdadero resultado de esa alquimia se observa "a posteriori".
De todos modos, conversar entre padres ayuda a aclarar las ideas.
Gracias por el aporte!!