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jueves, 10 de julio de 2008

Destino esquivo

Me enamoré, sufrí muchísimo porque, para simplificar, ella no era como yo quería, nuestra relación duro un año durante el cual nos separamos en varias ocasiones, yo decidía dejarla para no seguir sufriendo, finalmente la relación termino, pero seguía (de hecho creo que sigo) enamorado de ella. Al cabo de poco tiempo conocí a una persona, y empecé una relación, no estaba enamorado de ella (y no lo estoy ahora), pero por otra parte es una persona maravillosa, creo que haría feliz a cualquier hombre del mundo, cómo puede ser la vida tan triste, parece un castigo del destino; "Te voy a dar lo que quieres, pero te voy a quitar el amor." Y en pocas palabras esta es la situación. Todo ello me hace sentir mal, porque egoístamente tengo la sensación que me estoy aprovechando de esta persona y a la vez estoy perdiendo mi tiempo. He intentado analizar esta situación pero quizás necesito una visión-opinión objetiva.

Me parece que tienes una visión del amor como un sentimiento inexplicable que no depende de lo que la otra persona es y de lo que nos brinda.

En mi experiencia (profesional y de vida) te puedo asegurar que ese amor así como tu lo presentas es la parte de nuestro inconsciente que nos hace ligar a otro para cumplir con ciertos roles que tenemos “marcados” por nuestra historia. Para explicarlo de manera un tanto superficial y rápida: es como si con esa elección tu respondieras a esos papeles inconscientes de "no seas feliz", o "vive siempre insatisfecho", o "nunca hay lo que quieres" y etc etc.)

Cuando tu aclares qué buscas en tu vida, verás que las personas están ahí, solo tu eres dueño de donde pones tus ojos y al lado de quien permaneces. No es una cuestión de suerte: uno quiere y el azar se lo da o no se lo da, no es así...

Personalmente tengo una visión muy optimista del conflicto: los obstáculos que atravesamos y que nos hacen sufrir nos proponen una oportunidad para crecer. Creo que no estas perdiendo tu tiempo porque si no necesitaras esta lección, esta escena no estaría en tu vida.

Cada vez que conocemos a alguien hay una parte nuestra conciente que elige. Esa parte se fijará en los valores de la persona, si lo que esa persona es está dentro de lo que siempre buscamos... nos dejamos sorprender por virtudes en las que no habíamos pensado antes, pero cuando las vemos en la persona, nos enamoran. Todo eso es una parte de la atracción, digamos que es la parte "saludable" de la elección.

En cambio, muchas veces hay una atracción inexplicable. Ese tipo de atracción, eso que se da (por ejemplo, en el amor a primera vista, o en esas pasiones que no responden a una lógica, como si dijeras: pero si yo nunca quise esto, por que esta persona que me enamoró tiene justo aquello de lo que yo escapaba? O bien, Por que me atrae tanto si no estoy de acuerdo con su manera de vivir?) Entonces, eso inexplicable en las relaciones, muchas veces tiene que ver con otra forma de elección que hacemos, una elección no consciente que esta basada en el rol que sin saberlo hemos jugado a lo largo de nuestras vidas.

Imagínate un bebé que viene al mundo en una familia donde de alguna manera, también inconsciente, los papas sienten que siempre se viene a este mundo a sufrir. (Estoy planteando situaciones hipotéticas para que se entienda). Entonces habrá en la crianza de este niño por una parte, todo lo bueno, todo lo que le impulsa a crecer (por ejemplo: esfuérzate siempre, todo en la vida se consigue con esfuerzo) pero de otro lado, una especie de "mandato", en el sentido de una "declaración", como un mensaje interno que también dice: “nunca tendrás lo que buscas". Así que muchas veces nos quedamos atrapados en esa contradicción que no es consciente:

"Esfuérzate siempre" + "Nunca tendrás lo que buscas".

Esta contradicción no es consciente, y así sobrevive, en el inconsciente, una de cuyas reglas es permitir la existencia de cosas que se contradicen.

Fíjate que trampa, no? Cuando trabajas con un terapeuta tiene mucha importancia las palabras que usas y yo por eso remarqué en tu manera de usar el lenguaje porque cuando aparecen esas frases como las que usaste: "parece un castigo del destino"; "Te voy a dar lo que quieres, pero te voy a quitar el amor." Es como si me dijeras que hay en ti, ciertas ideas sobre el destino, sobre la suerte. Porque si es el destino y la suerte, bueno, entonces resignémonos que no hay nada que hacer.

Pero si es algo que nosotros mismos estamos haciendo mal, bueno, entonces hay que preguntarse y cambiar.

Te sugiero una consulta con un buen o buena terapeuta, te servirá muchísimo para explorar esta actitud así, como de mala suerte que "leo" sobre volando en tu texto y que te puede afectar no solo a nivel de pareja sino en otras formas de mirar la vida.

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